Relleno de pómulos con ácido hialurónico: Todo lo que debes saber
Los pómulos bien definidos son clave para un rostro armonioso y juvenil. El relleno de pómulos con ácido hialurónico es un tratamiento seguro y efectivo que permite resaltar los contornos faciales, devolviendo vitalidad y frescura al rostro. 1 Octubre 2024 | Ácido hialurónico
El paso del tiempo puede hacer que el volumen de algunas zonas del rostro, como los pómulos, disminuya, lo que puede dar una apariencia cansada o envejecida. El relleno de pómulos con ácido hialurónico es una de las soluciones más populares en la medicina estética para devolver la firmeza y definir los contornos faciales. Este tratamiento no invasivo ofrece resultados inmediatos, sutiles y muy naturales.
¿Qué es el relleno de pómulos con ácido hialurónico?
El relleno de pómulos con ácido hialurónico es un procedimiento estético que consiste en inyectar este compuesto en las zonas de los pómulos que han perdido volumen o en personas que desean mejorar la estructura de su rostro. El ácido hialurónico es una sustancia que se encuentra de forma natural en el cuerpo, especialmente en la piel, y su función principal es retener agua para mantener los tejidos hidratados, firmes y voluminosos. A medida que envejecemos, la producción de ácido hialurónico disminuye, lo que provoca pérdida de volumen y flacidez.
Mediante pequeñas inyecciones, los especialistas en medicina estética pueden restaurar ese volumen perdido, levantar los pómulos y mejorar los contornos del rostro, creando un aspecto más juvenil sin necesidad de cirugía.
Beneficios del relleno de pómulos con ácido hialurónico:
Resultados inmediatos y naturales:
El relleno de pómulos ofrece resultados visibles desde el primer momento. Tras la aplicación, los pómulos adquieren mayor volumen y definición, pero sin alterar las facciones de manera artificial.
Rejuvenecimiento facial:
Con el tiempo, la piel pierde elasticidad y volumen, especialmente en los pómulos. Este tratamiento devuelve la firmeza a la zona, logrando un efecto rejuvenecedor sin necesidad de cirugías invasivas.
Pocos riesgos y efectos secundarios mínimos:
Al tratarse de una sustancia biocompatible con el cuerpo, el ácido hialurónico tiene un bajo riesgo de provocar reacciones adversas. Los efectos secundarios más comunes, como inflamación leve o enrojecimiento, desaparecen en pocas horas o días.
Proceso rápido y sin recuperación prolongada:
El procedimiento se realiza en menos de una hora y no requiere un periodo de recuperación largo, lo que permite al paciente retomar sus actividades diarias casi de inmediato.
Corrección y personalización:
El tratamiento es totalmente personalizable según los objetivos del paciente. Además, si los resultados no son los esperados, el ácido hialurónico puede disolverse con otra enzima, permitiendo realizar correcciones.
Duración de los resultados:
Aunque no es permanente, el ácido hialurónico ofrece una duración de entre 12 y 18 meses, dependiendo del metabolismo del paciente y el tipo de producto utilizado.
¿Cómo es el procedimiento?
El tratamiento comienza con una consulta previa para evaluar las necesidades del paciente. El especialista determinará el volumen de ácido hialurónico necesario para conseguir los resultados deseados.
Paso 1:
Se limpia la piel y, en algunos casos, se aplica una crema anestésica para minimizar las molestias. El ácido hialurónico suele tener lidocaína, que también ayuda a reducir el dolor.
Paso 2:
El especialista realiza pequeñas inyecciones en áreas estratégicas de los pómulos para añadir volumen y definir la estructura facial. Este proceso se ajusta en tiempo real para asegurar que los resultados sean simétricos y naturales.
Paso 3:
Una vez finalizado el procedimiento, es posible experimentar una ligera hinchazón o enrojecimiento, pero estas molestias desaparecen rápidamente.
Cuidados después del tratamiento:
El relleno de pómulos con ácido hialurónico no requiere reposo prolongado, pero sí algunos cuidados básicos para garantizar los mejores resultados:
Evitar la exposición al sol y al calor extremo:
Después de las inyecciones, es recomendable evitar la exposición directa al sol o las actividades que impliquen calor, como saunas o baños calientes, durante las primeras 48 horas.
No realizar masajes o presiones en la zona tratada:
Para evitar que el ácido hialurónico se desplace, es importante no tocar o masajear los pómulos en los primeros días posteriores al tratamiento.
Hidratación adecuada:
Al ser una sustancia que atrae y retiene agua, es fundamental mantener una buena hidratación para potenciar el efecto del ácido hialurónico.
¿Quiénes son candidatos ideales para este tratamiento?
El relleno de pómulos con ácido hialurónico está indicado para cualquier persona que quiera mejorar el volumen en sus pómulos, ya sea por pérdida de definición debido al envejecimiento o por deseo estético. Además, es una excelente opción para quienes buscan un tratamiento no invasivo con resultados rápidos y sin tiempos prolongados de recuperación.
No obstante, el tratamiento no está recomendado para personas con alergias graves al ácido hialurónico o que tengan infecciones activas en la piel en el área a tratar.
Autor
Jhennifer Ceballos
Es una apasionada escritora de blogs especializada en medicina estética. Con una licenciatura en Comunicación y periodismo. Su interés por la medicina estética surgió de su deseo de ayudar a las personas a sentirse seguras y más bellas. Esto con un enfoque de información de confianza sobre procedimientos estéticos con fuentes sólidas como los médicos que forman parte de Bodyclinics.
Creación: 1 Octubre 2024